Durante la entrega de apoyos productivos, el Secretario dijo que se está “estirando la cobija” para apoyar al mayor número de personas.
Redacción
Celaya, Gto. 17 de julio del 2023.- La gente del campo y de las zonas rurales no está sola, porque el Gobierno del Estado ha mantenido su apoyo y redoblado esfuerzos ante el abandono del gobierno federal.
Así lo dijo Paulo Bañuelos Rosales, secretario de Desarrollo Agroalimentario y Rural del Estado, durante la entrega de apoyos de los programas Mi Familia Productiva y Sustentable, así como Reconversión Sustentable de la Agricultura, que se llevó a cabo hoy en el Campus Roque del Tecnológico Nacional de México.
Ahí, destacó que la administración del gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo ha tenido que hacer frente a la ausencia de recursos y programas de apoyo del gobierno federal, “estirando la cobija” a través de sus distintos programas para que las actividades agrícolas y ganaderas no se frenen.
“Como ejemplo el Gobernador creó una bolsa de $28 millones para los ganaderos y $21 millones de pesos para los porcicultores, para la compra de alimento para su ganado porque estaban enfrentando la falta de comida y tenían que vender sus vientres para costearla, entonces la actividad se estaba cayendo y no podíamos permitirlo”, dijo el Secretario.
La entrega de este día, dijo, también es ejemplo del impulso que se brinda, pues en ambos programas se hizo de forma directa con los beneficiarios, sin aportación de otro orden de gobierno. “Porque el propósito es apoyar sin trabas, sobre todo cuando la gente está dispuesta”, dijo Bañuelos.
Fue a través del programa Mi Familia Productiva y Sustentable que se entregaron 68 activos productivos, entre estufas ecológicas, molinos de nixtamal, módulos procesadores de alimentos, módulos tortilleros, entre otros.
Con una inversión total de $645 mil 746 pesos, de los cuales la SDAyR aportó $546 mil 217 pesos y los beneficiarios $99 mil 529 pesos.
Y mediante el programa Reconversión Sustentable de la Agricultura, se entregaron 102 equipos para la aplicación de agroquímicos en cultivos alternativos, con la finalidad de brindar las herramientas necesarias para facilitar el control de plagas y enfermedades. Fueron 100 fumigadoras eléctricas, una aspersora de motor y una aspersora eléctrica.
Esto con una inversión total de $207 mil pesos, de los cuales $144 mil 900 fueron de la SDAyR y $62 mil 100 por parte de los beneficiarios.