La industria tecnológica y los institutos gubernamentales tratan de llenar los huecos que deja el sector educativo en la formación de competencias
Valentín López
León, Gto. 19 de enero de 2024.- Entre la formación académica y la industria en desarrollo, se abre en el estado una fisura que gobierno y universidades intentan cerrar.
De acuerdo al gobernador Diego Sinhué Rodríguez Vallejo, el estado requiere desarrollar talento para los puestos de trabajo en áreas de innovación que el propio gobierno se esfuerza en impulsar.
Para eso, la industria tecnológica y los institutos gubernamentales tratan de llenar los huecos que deja el sector educativo en la formación de competencias para la tecnología.
Por ejemplo, las empresas instaladas en el Clúster Aeroespacial del Bajío, se alían para formar el talento recién egresado de las universidades, según lo expresa su presidente Óscar Rodríguez Yáñez, luego de darle la razón al gobernador.
“Es un hecho, sí es un hecho; pero qué es lo que estamos haciendo nosotros: es básicamente hacer sinergia con los mismos miembros y decir: oye, qué te hace falta, qué es en común, y sumamos fuerzas para poder desarrollar el talento nosotros mismos, de la mano de gobierno; gobierno tiene programas: el programa que tiene la Secretaría de Desarrollo Económico, los programas que tiene Cofoce, los programas del Valle de la Mentefactura de Idea Guanajuato, los programas que tienen Juventudes Guanajuato. La verdad es que gobierno, mis respetos, creo que se ha puesto mucho las pilas en el tema de apoyar el talento para poder facilitar a las PYMES el tema, pero también creo que del lado empresarial es nuestra tarea acercarse a los retos y también invertir de nuestro lado en la gente y en el talento nuevo”.
Una de las aliadas de estos programas es la empresa SpacePortMX, la cual se dedica al desarrollo de capital humano para la industria espacial del futuro.
A través de torneos de diseño de hábitats en el espacio, respaldados por el Clúster Aeroespacial del Bajío, esta empresa está interesando a estudiantes de bachillerato en el área aeroespacial.
Su fundadora, directora ejecutiva y CEO, Catalina Ramírez Vázquez, informa que más de 600 estudiantes han participado en 6 de estos torneos; y de ellos, 450 han sido guanajuatenses.
“De estos chicos, ya tenemos estudiantes que ya redireccionaron sus carreras al espacio, ya pensaron cómo van a obtener más prosperidad y más desarrollo, utilizando todas sus capacidades y hacia competencias hacia el espacio. Porque creo que Guanajuato tiene el potencial para ser un clúster aeroespacial poderoso, para ser un ecosistema espacial poderoso, y tenemos que empezar con los niños. Nosotros les enseñamos esto a los jóvenes de bachillerato, a través de un entrenamiento que se llama Torneo de Diseño de Hábitats en el Espacio. Como su nombre lo dice, durante cuatro días, nosotros entrenamos a los chicos para construir un hábitat, es decir, un lugar donde los humanos van a poder sobrevivir en el espacio, considerando problemas de gravedad, considerando la radiación, que no hay oxígeno, que no hay campo magnético, es algo muy difícil. Sin embargo, los chicos tienen la capacidad y diseñan cosas que tú no lo puedes creer”.
Para participar en estos torneos hay que estar pendientes de las convocatorias, pues la preparación en competencias espaciales es muy limitada en el país.
De ahí que experiencias inmersivas cortas como el torneo de SpacePort, sean consideradas capacitaciones valiosas para los jóvenes.
Pero la formación en competencias tecnológicas debe empezar desde la infancia.
Por eso, el Instituto de Innovación, Ciencia y Emprendimiento para la Competitividad (IDEA GTO) está aportando dossiers complementarios a las escuelas, según lo reporta su titular Juan Antonio Reus Montaño.
“De hecho, se han de estar entregando algunos dossiers complementarios a los libros que reciben los niños, con material sobre innovación, sobre temas de mentefactura. Creo que hay una gran alianza en el sector educativo con el sector empresarial. Entonces no solamente abordamos temática social, sino también el tema de formación. Te doy buenas noticias. Hoy tenemos por ejemplo programas también con el sector tecnológico, una alianza por ejemplo con Byju’s, que es una de las tech más importantes del mundo; es de la India. Tenemos un programa para estar formando a cientos de niños en temas de… Están saliendo con dos certificaciones en seis meses de estudio; dos certificaciones, para hacer videojuegos y para hacer apps; te hablo de chavitos de seis años que ya están desarrollando”.
Además del torneo sobre hábitats espaciales, SpacePort ya llevó a dos estudiantes guanajuatenses a una academia de verano, con duración de tres semanas, que se imparte en Texas, dice su directora ejecutiva.
Ahí, los estudiantes aprendieron el desarrollo de un emprendimiento espacial, y en la simulación, desarrollaron una empresa de turismo espacial y otra de comunicaciones.
De acuerdo a la consultora, estos son los primeros pasos en el espacio, por lo menos metafóricamente.
“Cuando te digo redireccionar sus carreras, es que ellos a lo mejor iban a ser biólogos; ahora saben que tienen que ser biotecnólogos y que después ellos van a ofrecer sus servicios al espacio porque en el mundo no hay una carrera de biotecnólogo espacial, pero ellos lo van a inventar. Esta es la generación que va a inventar las carreras. Entonces ellos están estudiando biotecnología o bioingeniería; fíjate, ingeniería de compuestos, que es una mezcla de químicos, y que puede desarrollar las coberturas para proteger las naves espaciales del calor en la reentrada en la atmósfera. O estamos buscando también personas que se dediquen a la minería; no tiene que ser ni maestría ni doctorado; una persona que ha tenido la carrera y la redirija a minería espacial, o soldadura espacial, o plomero, pero enfocado a todo lo que se hace en la plomería del espacio; entonces, imagínate el amplio rango: todas las carreras. Tenemos abogados que están estudiando derecho espacial, pero no hay una universidad que dé derecho espacial. Tenemos también médicos que están estudiando medicina espacial, ellos solos, porque hay esfuerzos aislados; es el mismo problema en el mundo.”
Catalina Ramírez Vázquez cree que las vocaciones tecnológicas se tienen que desarrollar en las competencias, en este caso trasladándolas al espacio.
Para eso, considera más valioso que las maestrías y los doctorados, que los estudiantes interesados encuentren su vocación, que aprendan eso en lo que son buenos y que les apasiona, lo dirijan al espacio y en ese ámbito les pagarán 90 por ciento más.
Pero el gobernador Diego Sinhué ha declarado que urge la actualización de los programas educativos universitarios, para pasar de la formación de abogados, contadores, psicólogos y nutriólogos, por ejemplo, a formar programadores, ingenieros y técnicos, que contribuyan a que la economía del estado transite de la manufactura a la mentefactura en los próximos treinta años.
Aunque reconoce la importancia que tiene la formación en las nuevas tecnologías, el rector de la Universidad LaSalle Bajío, Enrique Alejandro González Álvarez, cree que carreras como las enunciadas por el mandatario, siguen teniendo vigencia, aunque no para dirigirlas al espacio, como sugiere la CEO de SpacePort.
Las razones del rector son otras:
“Porque el ser humano va seguir pensando, va a seguir sintiendo, y por lo tanto, necesitamos psicólogos. El ser humano va a necesitar aprender a leer, a escribir, a pensar: necesitamos maestros. El ser humano va a tener que enfrentarse a un mundo que le llena de información: vamos a necesitar comunicólogos. El ser humano va a seguir comprando cada vez más porque el consumismo ha sido cada vez más fuerte: vamos a necesitar mercadólogos. El ser humano, finalmente, quisiéramos que siempre viviéramos en paz, pero no es así; el ser humano está en constante lucha, en que pelea, en tratar de imponerse al otro, y para eso vamos a necesitar abogados. Sí necesitamos ingenieros, sí necesitamos gente tecnológica, pero necesitamos mucha gente humana. El momento en que las universidades dejen las humanidades, en ese momento se acaba la sensibilidad del ser humano, y vamos a robotizarnos todos”.
RAGA